viernes, 3 de agosto de 2012





Taller:









Encontrando y expresando  mis estados emocionales







Prof. Silvina Tinte
Prof. Cristina Vispo
 



Prof. Silvina Tinte
Prof. Cristina Vispo
Introducción:

Vivir es sentir, pensar y actuar.  Nuestra vida se va construyendo con experiencias que se van sucediendo. Las experiencias que se repiten, los contactos que se tienen una y otra vez con diferentes áreas, conocimientos, culturas, costumbres; las conclusiones de valor que se van realizando, se van convirtiendo en el barniz de lo que somos. Y las emociones van tiñendo nuestras experiencias y poco a poco nos van caracterizando. Algunas veces, ciertas emociones se apoderan de nuestras formas de responder a determinadas situaciones. Y a veces nos ponen en dificultades.

Si en la vida emocional no se pone cierto “orden”, se libran batallas interiores que sabotean la capacidad de concentrarse, de ser útil en el trabajo, de mantener relaciones armoniosas con otros…. No se trata en este taller de lograr el equilibrio, para eso hace falta mucho, mucho trabajo. Pero acercarnos de una manera diferente a esos estados, caracterizándolos desde la representación, nos puede brindar un conocimiento sobre ellos, pero de una manera liviana y divertida.
Las palabras, las formas, los colores, el movimiento, son lenguajes que permiten expresar esos estados, conocerlos y obtener recursos para estar mejor con uno mismo. Nos concentraremos en los recursos de la expresión por medio de la representación y el dibujo. Y tal vez lograremos formas de expresión insospechadas, con sólo algunos recursos de la organización plástica.

Manual de instrucciones:

Muchos de los conflictos que tenemos que enfrentar se originan en algunos estados emocionales sobre los cuales no tenemos suficiente control. A veces, ante ciertas situaciones, las emociones irrumpen sin que sepamos las razones, sin que comprendamos  exactamente qué las dispara, y sin poder dominarlas y dominarnos.

Este taller se propone avanzar en nuestro conocimiento para poder reconocer a las emociones y acercarnos a comprender los procesos en los que se originan, hoy, (en un taller futuro se trabajará desde el cuerpo y sus movimientos expresivos)  desde la representación plástica; para poder conocer algunas acciones simbólicas que puedan cambiar  el curso de las mismas y que con el tiempo y la reiteración se constituyan en nuevas conductas psicológicas saludables.

Se tratará de poner luz en los aspectos que nos molestan o desequilibran, desde el arte y la acción creativa, y así poder trabajar con ciertas herramientas y estrategias que proporciona el arte, para poder ayudar a conocer y expresar positivamente los conflictos a partir de prestar atención, y observarse  con creatividad.

Algunas definiciones:

Si buscamos en el diccionario el significado de emoción, encontraremos: (en la enciclopedia Sapiens) “Estado de ánimo que se caracteriza por una conmoción orgánica, consiguiente a sensaciones, ideas o recuerdos que trae consigo fenómenos viscerales que percibe el sujeto y que se traducen a veces en gestos, actitudes, risa, llanto, etc.”
No hay absoluta coincidencia en los diferentes investigadores con respecto a una definición de emoción. Algunos autores la diferencian de los sentimientos  y otros la asimilan a esos sentimientos que:” generan pensamientos característicos, a estados psicológicos y biológicos y a una variedad de tendencias a actuar[1]
 Algunos autores diferencian las emociones en básicas o primarias, pero nadie se pone de acuerdo en cuales serían. Y otros las clasifican en positivas y negativas. En nuestro lenguaje hablamos de sensaciones de placer o dolor, y en general estos extremos existen en todas las lenguas. Existe un número ilimitado de emociones o sistemas de emociones e impulsos secundarios derivados, adquiridos y altamente complicados. No existe una distinción clara entre emoción y sentimiento, algunos autores piensan que la duración es lo que distingue una de otro.
En la percepción, existen similitudes que se pueden dar en los diferentes sentidos: un color puede ser cálido o frío, una forma puede ser suave o áspera, etc. En general tendemos a realizar asociaciones de significado entre percepciones y emociones, por lo cual es posible “materializar” plásticamente un contenido emocional..Los significados que les damos a las diferentes organizaciones visuales, pueden despertar diversas sensaciones emocionales.
 En síntesis, podemos decir que las emociones pueden asociarse a un significado, o directamente a una percepción: se pueden realizar conexiones .
Tenemos que tener en cuenta que las emociones no están localizadas en el cuerpo, sino en la mente, aquellas experiencias que se localizan en el cuerpo se llaman sensaciones. Las emociones son siempre difusas: es muy difícil estudiarlas separadamente de los efectos que producen.
Y casi siempre, las emociones se experimentan como algo propio, subjetivo, y como un algo que engloba toda la persona. Cuando se quiere estudiar la emoción experimentada, ésta desaparece, y de este modo se puede trabajar sobre las acciones que responden a una emoción, por ello, introducirse en el mundo emocional no constituye un camino seguro, y por ello es fascinante mezclarlo con el arte.

De todos modos podemos encontrar las siguientes emociones, que todos conocemos:
  • IRA: Furia, ultraje, resentimiento, cólera, exasperación, indignación, aflicción, acritud, animosidad, fastidio, irritabilidad, hostilidad, y tal vez en el extremo, violencia y odio  patológicos.
  • TRISTEZA: congoja, pesar, melancolía, pesimismo, pena, autocompasión, soledad, abatimiento, desesperación hasta depresión.
  • TEMOR: ansiedad, aprensión, nerviosismo, preocupación, consternación, inquietud, cautela, incertidumbre, pavor, miedo, terror, hasta fobia y pánico.
  • PLACER: felicidad, alegría, alivio, contento, dicha, deleite, diversión, orgullo, placer sensual, estremecimiento, embeleso, gratificación, satisfacción, euforia, extravagancia, éxtasis, hasta manía.
  • AMOR: aceptación, simpatía, confianza, amabilidad, afinidad, devoción, adoración, amor espiritual.
  • SORPRESA: conmoción, asombro, desconcierto.
  • DISGUSTO: desdén, desprecio, menosprecio, aborrecimiento, aversión,
Repulsión, asco.
  • VERGÜENZA y CULPA: culpabilidad, molestia, disgusto, remordimiento, humillación, arrepentimiento, mortificación y contrición.

Según el mismo autor [2], los programas efectivos para la prevención de conflictos emocionales tienen que ver con posibilitar la adquisición de las siguientes:

            HABILIDADES EMOCIONALES:
·         Identificación y designación de estados emocionales.
·         Expresión de estados emocionales.
·         Evaluación de la intensidad de  las emociones.
·         Manejo de estados emocionales, controlar la conversación con uno mismo para captar mensajes negativos como rechazos internos, comprender lo que hay detrás de una emoción, encontrar formas de enfrentarse a los temores, la ansiedad, la ira y la tristeza.
·         Postergación de la gratificación.
·         Dominio de impulsos.
·         Reducción de estrés, aprender el valor del ejercicio, de la imaginación guiada, de los métodos de relajación.
·         Conocimiento de la diferencia entre emociones o estados emocionales y acciones.

            HABILIDADES COGNITIVAS:
·         Conversación personal, diálogo interior como una forma de enfrentarse a un tema o desafío, o para reforzar la conducta propia.
·         Lectura e interpretación de las señales sociales, reconocimiento de influencias sociales sobre la conducta, y poder verse a uno mismo en la perspectiva de la comunidad.
·         Empleo de pasos para la solución de problemas y toma de decisiones como dominar impulsos, fijar metas, identificar acciones alternativas, anticipar las consecuencias.
·         Comprensión de la perspectiva de los demás, apreciar como la gente siente de diferente manera con respecto a las cosas.
·         Comprensión de normas de conducta aceptables y no aceptables. Conocer las consecuencias de la conducta.
·         Actitudes positivas hacia la vida.
·         Conciencia de uno mismo, desarrollo de expectativas realistas con respecto a uno mismo.



            HABILIDADES DE CONDUCTA:

·         No  verbales: comunicarse por el contacto visual, por la expresividad facial, el tono de voz, de  gestos, etc.
·         Verbales: hacer pedidos claros, responder eficazmente a la crítica, resistirse a las influencias negativas, escuchar a los demás, participar en grupos positivos de pares. Saber escuchar y plantear preguntas, distinguir entre lo que alguien hace o dice y las propias reacciones o juicios al respecto, enviar mensajes personales en vez de culpabilidad.
·         Asumir responsabilidades  reconocer las consecuencias de las propias decisiones  y cumplir los compromisos.
·         Resolver adecuadamente los conflictos, pelear correctamente, negociar compromisos.

CONOCIENDO LAS EMOCIONES:

Ante la irrupción de elementos que despiertan una respuesta emocional, se pueden reconocer diferentes estilos de enfrentarse a los mismos:
1-CONCIENTE DE SÍ MISMO: se trata de reconocer  que elementos ponen en funcionamiento una respuesta emocional, e intervenir tratando de modificar hábitos que nos traen consecuencias, muchas veces no deseadas. Se aspira a tener el control de las acciones consecuentes a las emociones.
2-SUMERGIDO: aquellos que se sienten abrumados, que no pueden, o que sienten que no pueden reaccionar de otra manera: hay un desbordamiento de emociones que se piensan imposibles de controlar.
3-ACEPTADOR: Aquel que se resigna, como si es fatal que las cosas ocurran de la manera que ocurren.

De cualquier modo se puede trabajar para lograr la Templanza o Temperanza: dominar el exceso emocional. Pues si las emociones son apagadas aparece el aburrimiento y la distancia. Si las emociones son extremas o persistentes, se vuelven patológicas y causan depresión inmovilizante, ansiedad abrumadora, furia ardiente y agitación maniaca. Por ello el ARTE DE SERENARNOS se convierte en una habilidad fundamental para vivir la vida plenamente y en plena conciencia, con equilibrio.

Por otro lado es preciso tener en cuenta que las emociones son contagiosas, dependiendo de los encuentros nutritivos o tóxicos que tenemos o desarrollamos con las personas que nos relacionamos. Algunos somos más susceptibles para captar los estados de ánimo de los otros. Esta capacidad para captar el estado de los otros nos permite también desarrollar conexiones, negociar soluciones, construir empatía.

Hay  muchas maneras de trabajar los estados emocionales; con el cuerpo y el movimiento, con la danza, con la representación teatral, mediante la conversación, y por supuesto que con la atención psicológica de manos de un profesional competente.

Mediante la expresión artística, es posible conocer, diferenciar, analizar y trabajar las emociones mediante recursos simbólicos  de representación. Esto no es mágico: es sólo una introducción a la introspección necesaria para conocernos emocionalmente y descubrir los recursos que no sospechamos que tenemos para expresarnos. Frecuentemente la forma es lo que se dice: encontrar las formas que expresen lo que sentimos se convierte en una manera de hacer nuestra la posibilidad de poder serenarnos y pensar con claridad en diversas situaciones.
Las emociones y nuestras reacciones sociales se convierten en temas en sí mismos, los sentimientos  se expresan a través de un vocabulario plástico de forma y color, de relaciones y organización. Descubrir estas relaciones es un juego apasionante. Espero que lo sea para ustedes.



ALGO SOBRE LA EXPRESIÓN:

El arte es indispensable para una vida plena. Desde fines del siglo XIX se viene originando un movimiento en arte, que ha poblado de recursos el universo de la representación, que ha facilitado la visión de un mundo nuevo y cambiante, mediante los medios tecnológicos que han revolucionado la vida en el planeta: las comunicaciones, los medios de comunicación, las velocidades en que se puede trasladar la gente, las cosas y las personas, y los cambios espaciales que se han sucedido desde entonces. Hemos tenido que adecuar nuestra mirada a nuevas realidades. Hoy el arte no  manifiesta esclavitud con un solo tipo de realidad: nos muestra infinitas maneras de representar, objetos tangibles y no tanto.

Las líneas, las manchas, los planos, los colores son el alfabeto visual con el que contamos: nos permite crear un universo de formas y significados. Podemos construir nuestra imagen del mundo, teniendo presente que llevamos con nosotros una imagen que aprendimos a construir, pero que está en continuo proceso de cambio. Pensemos en, por ejemplo, una forma abierta, (una parábola o un arco por ej.) y una cerrada,( un óvalo o un círculo por ej) .Cuando las caracterizamos de  “abierta” o “cerrada”, podemos también evocar características que se pueden aplicar a las personas: el carácter cerrado se puede equiparar a la introversión, y el abierto a la extraversión, y cada uno  está gobernado por diferentes reacciones emocionales. Luego podemos establecer otras similitudes: podemos pensar que la forma “abierta” tiene más que ver con emociones ligadas a la alegría, y las “cerradas” a la tristeza , y así podemos seguir casi ilimitadamente. Y si reforzamos la forma “abierta” con colores que asociamos a lo alegre, y las formas cerradas con colores oscuros, seguimos realizando una conexión entre expresión, contenidos y significados.

Así como en el lenguaje hablado (o escrito) se cristalizan formas estereotipadas, también en el lenguaje visual se pueden manifestar.
Vamos a bucear en esta visión del lenguaje, de la mano de las emociones. Veremos si podemos ponerlas en imágenes. Para ello reflexionaremos sobre ellas y sobre los recursos visuales.: sólo tendremos que estar dispuestos a pensar, escuchar, investigar, sentir, reir  y ver. Con toda la disposición abierta que esto significa.  

 Kepes[3] dice que, “…cuando nos libramos del fácil consuelo de todo estereotipo estético, y todo clisé interpretativo, experimentaremos la visión como tal, como visión. Dejar de ver las cosas aisladas en el espacio, sino como estructuras, permite ver el orden y la conexión de los acontecimientos en el espacio-tiempo, y esto constituye una revolución, no sólo en el arte, sino también en nuestra experiencia.” 

Bibliografía:

-Daniel Coleman:               La inteligencia emocional. Edit.Zeta. 2009.Barcelona.
-Daniel Coleman, y otros: El espíritu creativo. Edit. Vergara.2000. Buenos Aires.
-Lawrence Shapiro:                                La inteligencia emocional de los niños.
-Bernardo Stamateas:  Emociones Tóxicas. Edit. Vergara. 2009. Buenos Aires.
- Carl Jung y otros:                                                    El Hombre y sus símbolos.
-Sven Hesselgren:                                                 El lenguaje de la arquitectura.
-Gyorgy Kepes:                                                               El lenguaje de la visión.
-Donis Dondis:                                                               La sintaxis de la imagen.








[1] Daniel Coleman: La inteligencia emocional. Ediciones Zeta bolsillo. 2009. Barcelona
[2] Id.
[3] Gyorgy Kepes: “El Lenguaje de la visión”. Ed. Infinito. Buenos Aires, Argentina.