POSTÍTULO:
Actualización Académica en DRAMATURGIA
TALLER DE JUEGO DRAMÁTICO
Guía: Realizar una escena escrita definiendo:
·
Dos o tres oficios (remunerados)
·
Un lugar.
·
Dos emociones o sentimientos.
·
Dos o tres personajes en ese lugar y con un sustento.
·
Una relación entablada previamente.
UN ENCUENTRO CIVILIZADO
(En un aula de
una escuela nocturna, a la que van adultos, está sentado Sergio, albañil
de profesión, vestido con ropas de calle sencilla, y algunos otros alumnos que
se preparan y salen del aula. Sergio se queda solo, escribiendo. En el
escritorio Luisina, vestida sobria y elegante, ingeniera, se encuentra dando un
curso de Construcciones en la escuela) (Hace muchos años, en la secundaria,
habían tenido una relación que se rompió cuando Luisina se fue a estudiar a
Córdoba, y Sergio, que estaba romántica y apasionadamente enamorado de Luisina,
se quedó muy triste y decepcionado, tanto que no pudo tener una relación en los
seis años que pasaron, hasta hoy, que la vuelve a ver como su profesora. En
cambio Luisina, racional y práctica, lo dejó atrás con un poco de nostalgia)
Sergio: -No
esperaba volver a verte y menos acá.
Luisina: -¿Entendiste
el ejercicio?
Sergio: -Si,
si. Y vos -¿cómo estás?
Luisina: Bien. Muy bien. -¿Seguro que vas a poder
hacer las dos partes? ¿Te quedó claro como funciona el momento flector?
Sergio: -¿Nunca vas a poder hablar de lo que
pasó? ¿No?
Luisina: Mirá Sergio. Creo que no es el momento
ni el lugar adecuado para hablar de “eso”
Sergio: -¿Eso? ¿Lo que pasó entre nosotros es un
“eso” para vos?
Luisina: (fastidiada) Te digo que no es el
momento ni el lugar para que hablemos.
Sergio: -¿Y cuál sería el momento y el lugar
adecuado, si se puede saber?
Luisina: Acá estamos en la escuela, y tenemos una
relación de alumno y profesor. No hagas difícil esta situación. Mantengamos
distancia.
Sergio: ¡Al diablo con las distancias! ¡Al
diablo con las apariencias! ¡ Y con el orgullo que no me dejó preguntarte las
razones de tu alejamiento, y de tus prioridades! ….._¿No te das cuenta lo mal
que me dejaste, cuando te fuiste así….?
Luisina: ( incómoda, mirando a ver si entraba
alguien) Bueno, bueno, mantené la calma. Si querés después nos juntamos en un
café y hablamos.
Sergio:
¡Qué café ni qué café! Ahora
podrías demostrar un poco de sentimientos, si es que los podés sentir. La verdad….
que mirándote ahora, siento dudas.
Luisina: -¿Qué sabés vos, me querés decir? No
sabés nada de mí. ¡Nada! No te animaste a hacer algo copado, siempre
conformándote, siempre viendo lo “bueno de las cosas”, siempre viendo toda la
realidad con un halo mágico. -¿Qué sabés vos?
Sergio: ¿Ah, sí? -¿Y vos qué lograste con tu
visión “realista” y pragmática? - ¿Sos feliz acaso?
Luisina: Sí, señor. Soy muy feliz. Logré lo que me propuse, estudié, tengo un trabajo que me da mucha plata, me divierto dando clase a los que se quedaron como vos, y me caso a fin de año. -¿Qué te parece? No me quedé aferrada al pasado, llorando sobre la leche derramada, idealizando a alguien para no olvidarlo más:…. ¡Yo te dejé atrás, muy atrás, querido!
Luisina: Sí, señor. Soy muy feliz. Logré lo que me propuse, estudié, tengo un trabajo que me da mucha plata, me divierto dando clase a los que se quedaron como vos, y me caso a fin de año. -¿Qué te parece? No me quedé aferrada al pasado, llorando sobre la leche derramada, idealizando a alguien para no olvidarlo más:…. ¡Yo te dejé atrás, muy atrás, querido!
Sergio: Mirá vos. Me alegro por vos. ¡Sí señor!
Qué bueno que hayas podido seguir adelante tan bien. ¡Sos una triunfadora! Te
felicito. Y por supuesto te importa un pito como me fue a mí. -¿No? Siempre
tan considerada.
Luisina: ¡Ay querido!. Yo siempre fui igual. Vos
nunca me viste en realidad. Siempre escribiendo esos poemas chirles y dulces
sobre mí y el amor eterno. -¿Ves que tengo razón? Imagino que trabajarás con tu
padre, seguirás sus pasos… Pero por lo menos te anotaste en este curso…. Quizá
progreses un poco.
Sergio: ¡A la pucha! Qué mal que te he recordado
estos años…. Me podrías haber hablado de esta manera cuando te fuiste….Y quizá
te hubiera visto realmente como sos, y no en
esta imagen estúpida que guardé. ¡Soy un reverendo pelotudo! Seis años
recordando a alquien que no existe. ¡Qué nunca existió!
Luisina: Bueno, no te hagas el delicado ahora. Yo
siempre te preguntaba que planes tenías para el futuro: Y vos, te acordás que
me contestabas: ¡Vivir, y lo que la vida nos regale! ¡Querido! Se ve que la
vida te regaló mezquinamente. -¿Y ahora? .-¿Seguís pensando lo mismo?
(Despacito, como para ella misma) “contigo pan y cebolla”, ¡Ja! A mi no me gusta la cebolla….
Sergio: Me dejás sin palabras. Igual que hace
seis años. ¡Sin palabras!
Luisina: Convengamos que nunca tuviste muchas
palabras, eehhh. Pero bueno, ahora estamos acá. Dejemos atrás lo que pasó: lo
que pasó, pasó, Sergio, y te guste o no, si querés hacer este curso, y te conviene, por lo que
veo, comportémonos como personas civilizadas.
Sergio:
¡Civilizadas! No manifestar los
sentimientos, no ponerse en lugar del otro es -¿Civilizado? ¡Qué bien.! Que así
sea: Seamos civilizados, señorita profesora. -¿O tengo que llamarte ingeniera?
Luisina: Como gustes. Me da igual.
Sergio:
-¿Te da igual? No me lo parece. ¡En
fin!
Luisina: Okey. Volvamos a nuestro asunto: Momento
Flector para vigas de hormigón armado….
Sergio: ….A ver, profe: -¿Puede mirar si el
proceso del ejercicio está bien? El resultado me parece que no.
(Y
mientras la profesora se inclina sobre el cuaderno de Sergio, se va
apagando lentamente la luz)
POSTÍTULO: Actualización Académica en DRAMATURGIA
POSTÍTULO: Actualización Académica en DRAMATURGIA
Profesor Javier Falcón
Profesor Javier Falcón
No hay comentarios:
Publicar un comentario